lunes, 5 de agosto de 2013

Running: ¿moda o herramienta para el éxito en la vida?




Soy  uno de los 70.000  taxistas que trabajan en España.
Mi jornada de trabajo típica es de unas diez horas 7 días a la semana.
la mitad de la jornada conduzco y la otra mitad estoy esperando a que llegue mi turno 
para recoger al cliente.

¿Qué me hace no ser  un taxista mainstream? 
En el mismo año que decidí empezar en el taxi tomé una decisión que cambió mi vida.
Dejé de fumar… Aunque, en broma,  prefiero decir que cambié un vicio por otro. Sustituí fumar por correr, 
Hay algo esencial en el fondo de esta decisión y  es que decidí tomarme en serio la vida.
Correr cinco o seis días a la semana es una practica exigente,  has de  tomartelo en serio.
requiere planificar  días de entrenamiento  y descansos,
Todo influye en tu capacidad de correr, la alimentación, las horas de sueño… 
A cambio, esta práctica de deporte aeróbico me ha regalado estados de plenitud, de felicidad
similares a los que he logrado meditando…
Un  Gurú, iluminado, Osho, aseguraba que correr puede ser una forma de meditación, yo lo he experimentado.
 Correr no solo me ha servido como instrumento para la meditación,sino que me ha reconciliado con el mundo.
Ha resultado ser el mejor entrenamiento para enfrentar la vida real.
Sucede que, cuando estoy corriendo, mi cerebro es capaz de fijar la atención en un único tema sin esfuerzo.
 A menudo experimento una sensación  como si mi pensamiento fluyera sin interrupciones.
En ese estado es más fácil encontrar una solución a un problema que te preocupa o tomar un nuevo punto de vista,y sobre todo me ayuda a contemporizar las preocupaciones que genera el día a día…
Cuando corro por el monte llevo mi mente a un estado propicio para la  resolución de problemas de forma creativa. "Think out of the box".
Tras 11 años corriendo ya no puedo renunciar a mis cinco días trotando por el monte.
Soy feliz corriendo, y me ha ayudado  a gestionar  todos los problemas que la vida me ha enviado.
A cambio, hay mañanas en las que me duele todo... 
Aunque bien visto,las agujetas  me recuerdan que estoy vivo
Seguro que cualquier día lo prohiben  :)